Es importante vacunar y desparasitar a las mascotas por que están continuamente expuestas a gran variedad de microrganismos capaces de producir alteraciones de mayor o menor gravedad en su organismo. Estos pueden transmitirse a través del aire, de las heces, orina, u otras secreciones de otros animales. Otros pueden permanecer en el ambiente durante largo tiempo, por lo que una protección adecuada es importante para mantener una buena salud durante toda su vida.
Cuando vacunamos a las mascotas, las estimulamos a desarrollar sus propios mecanismos de defensa, para que puedan protegerse de las enfermedades infecciosas, garantizando la mejor proteccion contra dichas enfermedades, algunas de ellas muy peligrosas, y hasta en algunos casos mortales.
Vacunas recombinantes
Son vacunas de última generación, producidas por ingeniería genética, altamente seguras y eficaces. Esta tecnología de punta está siendo actualmente utilizada en todo el mundo, tanto en humanos como en animales de compañía.
Requisitos para una respuesta inmunológica adecuada
La vacunación debe ser realizada por un médico veterinario, sólo él puede evaluar a la mascota, saber si puede ser vacunada y cuál es la mejor vacuna a ser utilizada.
El profesional controlará siempre que el animal se encuentre en buen estado de salud. Bien alimentado. Libre de parásitos internos y externos, (áscaris ancylostomas, coccidios, giardias, tenias, garrapatas, pulgas, etc.)
Después de la vacunación
La mascota puede estar decaída o triste, puede tener fiebre y/o dolor generalizado o localizado en la zona de aplicación, durante aproximadamente 48 hs - 72 hs. Estos son síntomas normales que varían de acuerdo con cada animal y con el tipo de vacuna utilizada.
Algunas veces se puede formar un nódulo inflamatorio debajo de la piel en la zona de aplicación de la vacuna. Esta es una reacción también considerada normal y tiende a desaparecer en aproximadamente 15 días.
Estas reacciones esperables son prueba de que el sistema de defensa del animal responde bien a la vacuna. Ante cualquier duda consulte a su médico veterinario.
Vacunacion y desparasitación canina
Parvovirus, Esta enfermedad afecta el tracto digestivo de los perros y puede afectar el músculo cardíaco en cachorros muy jóvenes.
Moquillo, Se trata de una enfermedad de origen viral, es muy contagiosa.
Hepatitis infecciosa canina, es una enfermedad viral que es causada por el Adenovirus canino.
Leptospirosis, La leptospirosis es una enfermedad infectocontagiosa producida por un microorganismo del género Leptospira.
Rabia, La rabia es una enfermedad aguda infecciosa viral del sistema nervioso central ocasionada por un Rhabdoviridae que causa encefalitis aguda.
Tos de las perreras, Se caracteriza por ser muy contagiosa, y se localiza en la parte alta de las vías aéreas. Son algunas de las enfermedades más frecuentes que puede sufrir los perro. Por ello, resulta fundamental una correcta vacunación, que no culmina cuando la mascota deja de ser cachorro.
El mejor plan de vacunación es el que indique el veterinario, siguiendo criterios de edad y raza del animal, su estado inmunológico, el lugar donde vive el perro y también algunos de sus hábitos.
IMPORTANTE;
No bañe a su cachorro antes de haber finalizado su plan sanitario.
Mantengalo libre de parásitos internos y externos.
No sacarlo a pasear hasta haber concluido el plan vacunal.
Vacunación y desparasitación felina
La vacunación es la única vía de prevención de ciertas enfermedades durante los primeros meses de vida y aunque, una vez adulto, nuestro gato no tenga acceso al exterior, también necesita la protección de las vacunas.
Enfermedades felinas
Panleucopenia: Una de las enfermedades que integra la vacuna trivalente de los gatos. Es una enfermedad producida por un parvovirus.
Rinotraqueítis: Otra de las enfermedades que componen el trío de la vacuna trivalente. Enfermedad provocada por un herpesvirus.
Leucemia: Enfermedad muy grave y especialmente contagiosa para nuestros gatos causada por un reovirus.
Rabia: Enfermedad vírica popularmente conocida que se transmite por la saliva inoculada tras la mordedura de un animal infectado.
La vacunación se basa según el criterio del veterinario, evaluando las necesidades del gato y de sus características.
Se deberá repetir la vacunación anualmente para que el efecto siga siendo positivo.