El embarazo de la perra es un motivo de alegría para toda la familia, y es precisamente durante esta etapa que la mascota necesita atenciones y cuidados.
Muchos son los factores a tener en cuenta al momento de que la mascota quede embarazada, la alimentación, los ejercicios, la búsqueda de un lugar apropiado para el parto, como asi tambien quien va a recibir a los cachorros, lo ideal es la ayuda de un veterinario.
Respecto a la alimentación, la perra requiere de una importante mejora alimenticia durante el embarazo, con el fin de que los cachorros crezcan saludables mientras ella recibe todos los nutrientes que su estado requiere. Hay que tener en cuenta que durante el primer mes de embarazo la perra debe seguir comiendo la misma cantidad habitual (según su peso y edad), luego hay que ir aumento poco a poco hasta llegar mas o menos a un 50 % mas de alimento. Es mas que importante tener en cuenta la cantidad de proteínas que ingiere ya que luego el animal debe producir bastante leche para alimentar a sus cachorros. Es recomendable darle alimento balanceado ya que el mismo posee muchos nutrientes importantes. Proteínas y vitaminas entre ellos.
Se puede complementar esta ingesta de proteínas dándole huevo cocido, leche, y yogurt. De vez en cuando es bueno prepararle un buen churrasco cocido, ya que, crudo puede tener ciertos parásitos que le hacen mal a las futuras crías. Durante el embarazo es muy importante que el animal esté correctamente hidratado, la leche ofrece nutrientes que le sentarán muy bien.
Además durante esta etapa, más que nunca, la perra debe contar con abundante agua fresca y siempre limpia para beber cuando tenga ganas, la misma es necesaria para la gestación y la lactancia, ayudándola a producir leche para sus cachorros.
Durante el embarazo es bueno que se mantenga en forma. Sacarla a pasear como de costumbre, sin exigirla demasiado y a medida que se acerque mas el día del parto tratar de que sus paseos sean mas cortos. No se encuentra en un estado de salud delicado que le impide esfuerzos, por lo tanto, es muy importante que la perra se mantenga ejercitada durante esta etapa.
Evitar retarla o castigarla mientras dure su embarazo, es fundamental darle mucho cariño, para que ella sienta ese afecto y la protección para su cría y no una futura amenaza. Cuándo llega el momento, la perra va a buscar su lugar a donde tener a sus cachorros. Tratar siempre de que escoja un lugar cómodo.
Cuando ya tenga su lugar, va a pasar gran parte del día ahí, hay que proporcionarle unas mantas y muchos papeles, cartón para que la perra los acomode a su gusto. No tan solo lo va a acomodar si no que va a empezar a llevar todo tipo de juguetes y objetos personales de ella como para ir marcando su propio territorio. Se recomiendan generalmente las cajas para su parto, para que los cachorros estén protegidos.
Es difícil predecir el momento de parto, sobre todo si no sabemos la fecha exacta de la cruza. Generalmente la gestación dura 63 días, con un rango de 54 a 66 días. Entre una y dos semanas antes del parto, se notará que la mascota empieza a adoptar un comportamiento maternal.
Aunque puede ser más o menos evidente, las mamas se desarrollan y producen leche. Alrededor de un día antes de parir, se produce la expulsión del tapón mucoso, observándose la salida de un flujo, generalmente blanquecino o amarillento, por la vulva de la perra.
La temperatura, que normalmente ronda los 38 grados centígrados, baja un grado entre las 12 y 24 horas antes del alumbramiento, cayendo hasta los 37ºC.
Es muy importante que los cachorros recién nacidos tengan una calefacción adecuada.
Es fundamental que durante esta etapa visite al veterinario para una revisión completa. Seguir las recomendaciones del médico y ante cualquier situación no hay que dudar en consultarlo.