Los defensores de los derechos de los animales han expresado su indignación por un procedimiento quirúrgico que se lleva a cabo para solucionar el problema de los perros que ladran mucho.
Se trata de la desvocalización canina, una operación para extirpar las cuerdas vocales del perro, tras la cual el animal en lugar de ladrar sólo puede emitir un murmullo.
La operación que requiere someter al perro a anestesia general parece ser el último recurso de algunos dueños de perros que se ven amenazados con quejas de vecinos por el ruidoso animal.
Esencialmente las personas están desvocalizando a los animales sólo por la conveniencia humana, en lugar de tomarse la molestia de entrenarlos para que no ladren.
La operación antiladrido, es un procedimiento veterinario en el que las cuerdas vocales del perro se extirpan quirúrgicamente. Es una cruel forma de mutilación.
Los perros necesitan expresarse, necesitan ladrar, moverse, gruñir.. necesitan ser perros. Con la desvocalización los están privando de uno de sus principales sistemas de comunicación: ladrar, se quedarían totalmente mudos, lo que los convertirían en perros con serios problemas de conducta.
Es muy importante saber canalizar la energía de la mascota, por eso no basta sólo con correr por el jardín, sino llevarlos a dar un largo paseo para que el perro llegue a casa relajado. También es necesario sociabilizarlos, así que hay que procurar buscarle amigos. Tener con ellos una rutina diaria. Acostumbrarlos a estar en casa solos es muy importante para evitar esos ladridos incómodos que se pueden alargar durante horas hasta el regreso de su dueño. Por eso es muy importante una buena educación desde que son cachorros.
El ladrido es un comportamiento completamente normal, ideal para la comunicación del perro, de custodia y protección, pero un gran problema cuando se produce en exceso. Encontrar la causa de los ladridos excesivos es clave.
Los ladridos del perro realmente se pueden controlar, especialmente cuando se comprende por qué el perro está ladrando. Las causas son variadas, pero en última instancia, se debe aceptar que es una forma normal de comunicación del perro,el perro sólo tiene que ladrar cuando es apropiado.
La operación antiladrido puede causar daño y no debe ser considerada como una opción.