Muchos propietarios creen que en verano es conveniente cortarle el pelo al can para que no sufra tanto del calor.
algunas veces el hecho de cortarle el pelo al perro no es la mejor opción para mantenerlo fresco, con el tiempo puede convertirse en algo negativo.
El manto de pelo de un animal no sólo es útil para el frío, sino que también les protege del sol.
Los perros no sudan por la piel como los humanos. Ellos regulan la temperatura a través del jadeo, no del sudor corporal.
El pelo del perro está diseñado para aislar del frío y del calor. Cortar el pelo del perro excesivamente solo ayudará a que los rayos del sol entren con mas intensidad y aumente la temperatura del cuerpo del perro y por ello tenga mas calor.
El pelo del perro no es un abrigo, el rapado excesivo, solo se debe hacer como última opción. Nunca como norma.
La piel del perro está diseñada para estar debajo de la protección del pelo. Los perros tienen un 35% mas de posibilidades que las personas de padecer cáncer de piel si se la deja expuesta.
El manto es imprescindible, si no lo tiene estará desprotegido y se quemará con mucha facilidad con los rayos del sol.
Dejar la piel expuesta al sol continuamente hará que tenga cambios en la pigmentación y dejará manchas y pecas.
Cuando la piel está desprotegida, se engrosa para poder soportar las agresiones externas.
El rapado excesivo y continuo hace que pueda padecer alopecia y otros problemas derivados del manto.
Los cortes de pelo en perros se realizan con mucha precaución y bajo el cuidado de profesionales.
